Colombia - 01 agosto, 2022
La gente Carijona del municipio de Miraflores, a las orillas del río Vaupés, tiene un amplio conocimiento de la biodiversidad local que se expresa en una inmensa y deliciosa variedad de platos. La yuca brava (wui), por ejemplo, se convierte en tortas de casabe y fariña mientras que con su almidón se preparan deliciosos mingaos.
La palma de kumu o patabá es un alimento fundamental que, además, da aliento a los enfermos. Las frutas de cervera (ëbatá), mamita (waroro) y caimo (waraimë) se comen como golosinas a la vez que ayudan a aliviar la gripa. El ají (jëmëi) es el acompañamiento perfecto para mojojoy, la quiñapira y la marisca.
Foto: Edwin Roncancio
Para fortalecer el conocimiento, la educación y la seguridad alimentaria del resguardo indígena Puerto Nare, estos saberes se vienen compilando bajo el liderazgo de Edwin Roncancio y con el apoyo del SENA. El proceso también incluye el conocimiento tradicional de las mujeres sabedoras Nohora Narváez, Ana Benjumea, Lilia Gómez y Efigenia Romero y la participación de toda la comunidad.
Foto: Nurys Silva
Este proceso de investigación y experimentación sobre los alimentos propone combinar los conocimientos tradicionales sobre la comida y los productos comestibles del bosque con distintas técnicas de transformación para producir frutos secos, mermeladas, salsas picantes y vinos. Se busca ultimadamente seleccionar tres alimentos para la subsecuente obtención de registros INVIMA y la consolidación de una línea de producción y comercio que contribuya al fortalecimiento de la economía propia a partir de los frutos de la selva.
Foto: Nurys Silva
El proyecto Manekone Karijona Esemarï Tae (Vamos por el fortalecimiento carijona) del Resguardo Indígena de Puerto Nare cuenta con el respaldo de Tropenbos Colombia y el programa Visión Amazonia.